Si uno de los gemelos Koffing se infla, el otro se desinfla. Mezclan constantemente sus venenosos gases.

En raras ocasiones, se produce una mutación y dos pequeños Koffing se unen formando un Weezing.

A Weezing le encantan los gases que emanan de los desperdicios que quedan en la cocina. Este Pokémon busca casas sucias y descuidadas para crear su hogar. De noche, cuando los habitantes de la casa duermen, va a por la basura.

Weezing reduce y agranda el doble cuerpo que tiene para mezclar los gases tóxicos que contiene. Cuantos más gases mezcle, mayor será la toxicidad y el nivel de putrefacción del Pokémon.